Daniela es peluquera y Mario, camionero. Cuando conocieron a Providus decidieron sumarse para alcanzar la vivienda propia.
“Es muy gracioso cómo pasó todo“, comenta Daniela. “En el 2018 casi dejamos nuestro plan. Pero yo no quise abandonarlo, así que seguí pagando en secreto, sin que mi marido se enterara“, recuerda.
Daniela cuenta que si bien continuó con el plan, no seguía los sorteos. Hasta que un día le sonó el celular con un número de Córdoba, pero como no lo tenía agendado, no atendía: “Llamaron una semana seguida, pero me daba desconfianza y cortaba. Hasta que un día Mario me insistió para que atendiera. Cuando escuché no lo podía creer ¡Habíamos adjudicado con Providus!”
Con su primera adjudicación, la familia decidió invertir en un lote, que les permitiría comenzar a construir su hogar. Y volvieron a sumarse a un plan.
En diciembre adjudicaron por segunda vez y destinarán el efectivo a finalizar la construcción de su ansiada vivienda.
Actualmente están levantando las paredes y, por supuesto, van por una tercera adjudicación para poder realizar la mudanza. “Estamos muy felices, confíen en Providus porque cumplen y los
proyectos se concretan“, finaliza Daniela.
Felicitamos a Daniela y a su familia por la constancia y el esfuerzo. ¡Gracias por hacernos parte de su historia!